domingo, 11 de mayo de 2008

MADRE DE DÍA, MADRE DE NOCHE

MADRE DE DÍA, MADRE DE NOCHE

Hoy es el día de las madres, el día en que regalamos rosas, el día en que los centros comerciales, restaurantes, sitios de esparcimiento, cines y todos los puntos cercanos, se rinden ante la presencia de las madres.

Pero. ¿Solo un día?, es obvio que a ciertas personas se les da por celebrar con anticipación. Es su día, al menos hoy hay que levantarse temprano, llevarle el desayuno a la cama, decirle lo linda que está aunque recién se haya levantado y los mechones de su pelo estén en un desorden universal.

Los padres de familia, deben esmerarse en este día, no creo que sea tan necesario sobre girar la cuenta bancaria, endeudarte hasta los codos con lo último en tecnología para el hogar, tampoco se trata de comprárle la lavadora del año, menos la refrigeradora y muchísimo menos el auto. Creo que un: “buenos días mi amor, que tengas un hermoso día”. Es más que suficiente.

Los hijos, sí nosotros,somos los encargados de poder hacer maravillas con nuestras madres. Tampoco te esmeres en darle un regalazo de la tienda, tampoco que gastes todas tus propinas e incluso tu presupuesto de la universidad. Creo que una carta a puño y letra, una poesía, un trabajo de manualidades que los colegios hacen también sería una buena idea. Si no te sabes una sola poesía,en este día es válido plagiar (disculpame Bryce, pero son tantas veces) entonces entra a Internet y encontrarás miles de poesías para ella. Regálale una rosa natura, no una artificial, no creo que sea complicado encontrar una rosa natural, tener el detalle de decirle:”Buenos días mamá, este es tu día y la pasaremos a tu lado”. Sería empezar muy bien el día.

Es cierto que hoy es su día, su día, no el tuyo. No es dable que celebres desde el viernes por anticipado, tampoco lo es que en este día, en donde ella se merece descansar, tú llegues con tus amigotes para que ella te prepare un almuerzo; tampoco es justo que en este día se haga una reunión familiar donde conozcas a todo el árbol genealógico de tu familia y la única encargada de la cocina sea tu madre; menos justo es también que en este día ella se conmemorada y resaltada pero que para el día siguiente te olvides que es tu madre y que sólo es un día al año.

No hay mejor regalo que decirle y, más que todo, demostrarle, lo mucho que la quieres y lo agradecido que estás con ella. Recuerda que es su día, que este día nada te costará lavar los platos, tender la cama, preparar la comida y si no sabes ni hervir el agua, pues es mejor salir temprano para encontrar un restaurante donde todos pasen un buen momento. Si no dispones de un presupuesto alto para un restaurante, pues puedes encontrar en los mercados precios más cómodos. Hay una inmensa variedad de sitios, detalles, presentes y deferencias que puedes hacer para que ella siga sintiendo que los pantalones ello los zurció y ella los lleva puesto.




Jesús Ramírez Valdivieso